Apenas unos pocos días atrás un intenso llamado interno me llevó a escribir finalmente la historia detallada que tenía pendiente desde hacía cerca de dos décadas, relativa a las entregas realizadas por parte del espíritu de Victor Hugo. Un escrito que lleva por título:
La madrugada de hoy 12 de Julio del 2020 me es entregada una compleja historia que debo intentar plasmar, asociada a los muchos años de mi vida en contacto con entidades espirituales incorpóreas de otras dimensiones y el propósito de los mismos en el contexto de los tiempos planetarios que corren. Ello me lleva a empezar este nuevo espacio cuyo tema central será la Metempsicosis, la transmigración de las almas.
El inicio de la encomienda quedaría marcado por la siguiente sincronicidad.
El inicio de la encomienda quedaría marcado por la siguiente sincronicidad.
Temprano por la mañana, aun recostado en mi cama, empiezo a esbozar un índice. Me levanto y, al subir la persiana de la puerta de la recámara que da al jardín, veo un pequeño gatito blanco de ojos azules de pocas semanas de nacido que tembloroso me mira. Su respiración es anormalmente profunda y entrecortada. Me es claro que llegó pidiendo ayuda.
Se deja levantar sin oponer resistencia alguna ni intentar huir. Me siento en la cama con él entre mis brazos para darle calor, a la vez que con mis manos intento darle energía para ayudarle en su propio proceso.
Se deja levantar sin oponer resistencia alguna ni intentar huir. Me siento en la cama con él entre mis brazos para darle calor, a la vez que con mis manos intento darle energía para ayudarle en su propio proceso.
Maúlla un poco y empieza a relajarse muy suavemente. Su respiración pasa de angustiante e intensa a superficial, tiembla muy ligeramente como un sutil ronroneo, empieza a aflojar su cuerpo y estira sus patitas, como si estuviera con su madre.
Han transcurrido menos de diez minutos y noto como su cuerpo ya se encuentra totalmente relajado. Segundos después libera sus esfínteres, su orina moja la manga de mi jersey y noto como muy suavemente se desprende su cuerpo sutil y se va, en Paz.
El recipiente temporal inanimado del pequeño mensajero regresará a la tierra.
Su alma, continuará su ascensión
El evento anterior me lleva de manera natural a recapitular sobre cuantos otros pequeños animales: pájaros, ardillas y ahora este pequeño gatito han buscado mi compañía antes de partir, en los años previos.
Lo mismo me ha ocurrido con personas enviadas por sus familiares fallecidos o cerca de dejar sus cuerpos, e incluso algunos regresados desde la propia muerte.
"En los planetas punitivos hay hombres, bestias, plantas
y piedras que contribuyen a la liberación del mundo,
del mismo modo que, en los mundos de recompensa,
hay soles que contribuyen a liberar a los mundos punitivos.”
"Conversaciones con la eternidad"
Victor Hugo